Turistas y visitantes de Querétaro y otros estados se hicieron presentes en distintos pueblos mágicos para aprovechar la reapertura, no obstante, no todos atendieron las medidas necesarias de salud, iban sin cubrebocas y se alomeraban en comercios y locales.
Principalmente en el pueblo de Bernal, uno de los más turísticos en nuestro estado, los turistas recorrían las calles, pero un alto porcentaje no utilizaba el cubrebocas, que es una de las medidas más básicas para prevenir contagios de COVID-19.
En las calles, los habitantes y comerciantes locales aseguraron que, desde grupos de amigos y hasta familias enteras (de más de 5 integrantes) poco a poco han vuelto a hacer recorridos turísticos; por otra parte, muestran su preocupación de que el incremento de personas pueda afectarles si se llega a implementar un nuevo cierre.
En los puntos turísticos, como la Peña de Bernal, únicamente dos elementos de seguridad y vecinos vigilantes restringen el acceso de las personas que desean subir a escalar, y mantiene un costo de 30 pesos con horario desde las 8 de la mañana y hasta las 5 de la tarde.
Para muchos de los grupos de tursitas, tanto familias, como parejas y grupos de amigos, este fin de semana significó su primera salida desde la reapertura paulatina para la economía y el turismo lugar; coincidieron que la falta de confianza era uno de los factores que les impedía regresar a hacer recorridos o salir a otros lugares de esparcimiento.
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