La vacuna de Johnson & Johnson contra COVID-19 ha sufrido una larga lista de contratiempos. Desde preocupaciones sobre efectos secundarios raros que llevaron a una pausa de 10 días en su uso en los Estados Unidos, hasta errores de un contratista de fabricación que hicieron que millones de dosis quedaran inutilizables.
Sin embargo, hace unos momentos, la compañía anunció una gran victoria. Los creadores de la vacuna de Johnson & Johnson anunciaron que un nuevo estudio mostró que la vacuna produce anticuerpos neutralizantes contra la variante Delta. Un nuevo problema que ahora se extiende por todo el mundo.
La compañía también dijo que otro estudio había demostrado que las respuestas inmunes generadas por la vacuna duran al menos ocho meses.
Los datos sobre la capacidad de la vacuna para provocar una respuesta de anticuerpos a la variante Delta son una gran noticia. Ya que Delta continúa extendiéndose en territorio estadounidense. Y en todo el mundo.
Variante Delta
El viernes, Public Health England informó que la variante Delta es la causa del 95% de los casos de COVID-19 en Reino Unido. Por su parte, la directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, la Dra. Rochelle Walensky, dijo que ahora se cree que Delta ser la segunda variante más prevalente en los EE. UU. Y que en algunas partes del país representa la mitad de los casos secuenciados del virus.
“Hay comunidades que son vulnerables y donde ahora estamos viendo aumentos repentinos de casos, y de hecho también hospitalizaciones. Esto debido a lo que podría ser la propagación de la variante Delta y las bajas tasas de vacunación en estas comunidades”, dijo Walensky.
Se ha demostrado que otras vacunas COVID-19 ofrecen protección contra la variante Delta. Entre ellas, Moderna, pues a principios de semana informaron que su vacuna provocó una actividad neutralizante contra la variante Delta. Public Health England señaló que tanto Pfizer como AstraZeneca ofrecen una fuerte protección contra la variante originada en la India.