El presidente rechaza la petición del hijo de Luis Donaldo Colosio de que indulte a Mario Aburto y cierre la investigación, a 30 años del magnicidio del candidato presidencial del PRI.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha afirmado este martes que el asesinato de Luis Donaldo Colosio, hace casi tres décadas, es un asunto de Estado que se debe esclarecer hasta el fondo.
Con ello, el mandatario ha respondido a la petición del hijo del candidato del PRI asesinado, Luis Donaldo Colosio Riojas, de que otorgue el indulto al único detenido por el crimen, Mario Aburto, y ponga “carpetazo final” a la investigación. “No puedo hacerlo”, ha dicho López Obrador este este martes en conferencia de prensa. “Sé que él ya no quiere, ni sus familiares, saber nada de esto, que fue terrible, pero se trata de un asunto de Estado, y yo quiero que, en lo que a mí corresponde, no se deje de investigar. Yo no voy a dar un carpetazo a un asunto así”.
El caso Colosio ha vuelto a estar en las primeras planas de la prensa luego de que la Fiscalía General ha presentado ante el juez la teoría de que Aburto no actuó en solitario, sino que existió una conspiración para asesinar a Colosio y que hubo un segundo tirador en el lugar del crimen, ocurrido el 23 de marzo de 1994, en el poblado de Lomas Taurinas, Tijuana (Baja California). La FGR ha acusado a Jorge Antonio Sánchez Ortega, un exintegrante del Cisen, el órgano de inteligencia del Gobierno, que estaba asignado al equipo de seguridad del candidato presidencial del PRI. También acusó a Genaro Garcia Luna, que entonces era subidirector Operativo del Cisen, de encubrir a Sánchez Ortega. Aunque los fiscales solicitaron una orden de captura de los nuevos acusados, el juez rechazó las pruebas aportadas sobre su presunta implicación y negó la petición.
Lope Obrador, ha afirmado que el magnicidio de Colosio trastocó la estabilidad política del país. “Ningún crimen debe quedar impune, pero, cuando se trata de un caso así, mucho menos, porque estamos hablando de la estabilidad política, de la violencia que afecta a todo un país. Se trata de un dirigente, es un candidato a la presidencia de la República. Ningún crimen se debe permitir, pero este es un asunto de Estado”, ha insistido el mandatario. “Por lo general, [una de] las máximas en el argot del poder es que los crímenes de Estado nunca se aclaran, entonces no debemos nosotros decir ya, vamos a darle vuelta a la hoja”, ha añadido.
El renovado impulso de la Fiscalía en el caso Colosio ha sido entendido por la oposición como una jugada política del Gobierno en un año en que se juega la presidencia en los comicios del próximo 2 de junio. El magnicidio toca el corazón del PRI, uno de los partidos de la alianza opositora Fuerza y Corazón por México.
“Yo no estoy dispuesto a usar una situación tan lamentable con propósitos políticos, mucho menos con propósitos politiqueros, pero sí es importante que no haya impunidad si se trata de un crimen que, de acuerdo con la Fiscalía, tiene alguna relación con una institución del Estado [como el Cisen]”, ha sostenido López Obrador.