Hace poco más de un mes, entidades como Baja California Sur, Yucatán y Quintana Roo registraron un repunte en contagios diarios de COVID-19. El número de nuevos infectados incrementó diariamente, lo que provocó un retroceso en el semáforo epidemiológico de esos estados. No obstante, en ese momento, las autoridades de Salud negaron una tercera ola de COVID-19. Sino que se trataba de un repunte regional que no afectaba a todo el país.
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En conferencia matutina desde Palacio Nacional, el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, reconoció que el país vive un repunte de contagios por el virus SARS-CoV-2. Lo que representa una tercera ola de COVID-19 en lo que va de la pandemia y la segunda del año.
Además, el funcionario destacó que pese a la existencia de dicho repunte, las defunciones no han crecido en la misma magnitud. Debido a que: “Las vacunas tienen ese efecto, aún cuando una esté persona contagiada, no presenta casos graves”.
“Tenemos una situación donde hay un repunte, una tercera ola, a lo largo de la epidemia, segundo en el año. Pero afortunadamente y con una razón conocida, que es la vacunación, no aumentan las defunciones a la misma velocidad que los contagios”, afirmó.
Repunte en contagios, no en hospitalizaciones
Por su parte, el presidente López Obrador confirmó que pese al aumento de contagios el número de muertes diarias sí ha disminuido. Por lo tanto, aseguró que el peligro es menor al experimentado con las dos olas previas de COVID-19 que atacaron a México.
“Sí hay un pequeño repunte, pero no hay la hospitalización que se podría esperar y lo más importante de todo, que no hay fallecidos. Ha bajado considerablemente el número de fallecidos. Es algo que aquí hemos estado hablando”.