Como los chatarreros y recicladores, algunos partidos políticos continúan con la “compra” diputados.
CONTRAFILO
Colaboración Especial de José García Segura
Hasta antes de la pandemia, congresistas federales del PT, MC y PVEM aparecían en subastas, al lado de los colchones, tambores y refrigeradores.
Tras los comicios del 6 de junio, el hándicap (desventaja) lo conforman partidos políticos de reciente creación: Fuerza por México (FXM), Redes Sociales Progresistas (RSP) y Partido Encuentro Solidario (PES).
Como cualquier fierro viejo, el pregón de los chatarreros por las calles de México dice así: “Se compran-colchones-tambores- diputados-partidos, o algo de fierro viejo que vendan…”
Este 1 de septiembre, el partido del presidente de México continuará, sin duda, como primera fuerza política. Seguido por los aliancistas del PAN, PRI y PRD.
La “compra” de diputados podría convertir a MC y no al PT, en tercera fuerza política nacional.
En otro tiempo, el PT, cual chatarrero, “compraba” para su bancada diputados de dudosa honestidad.
Figúrese: de Morena y el PES…
¿Será necesaria la creación, por parte del INE, de una “dirección de Residuos Sólidos” y, por consiguiente, lanzar por la borda a los “recolectores piratas”?
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Chatarra
Deje le cuento que en México existe infinidad de empresas dedicadas a la compra venta de chatarra.
Más de una podría comprar la nueva y vieja “chiquillada” política y meterla en sus molinos de trituración. Tal como sucede con los metales ferrosos y no ferrosos, el aluminio, los aceites (vegetal y de motor), papel, cartón, vidrio, plásticos, PET …
El PRI es experto en acopio de partidos chatarra. Los priistas de hoy están a punto de caer en esa categoría, a juzgar por la ineptitud de su dirigente, Alejandro Moreno (a) Alito, Amlito.
Los fracasados PRI y morena bien saben de recolección, manipulación, tratamiento y venta de partidos chatarra.
¿Nombres?
El Partido Verde Ecologista de México (PVEM), por ejemplo, a punto de perder su registro por enésima ocasión debido a que promovió el voto, a su favor, en veda, vía redes sociales/influencers.
De cara al 2024
Es claro que el proyecto Lópezobradorista no quita la vista en el 2024 con Ricardo Monreal al frente.
Marcelo Ebrard y Claudia Sheinbaum habrán quedado a un metro de distancia de tan importantes comicios.
Y no quita don Andrés el dedo del renglón porque para su proyecto necesita de la mayoría calificada que perdió hace dos semanas.
Si morena no convence al PRI en la Cámara de Diputados, adiós Guardia Nacional en el Ejército. Adiós al monopolio de la Comisión Federal de Electricidad; hasta luego al proyecto para poner fin al INE y a los congresistas plurinominales.
Si los oposicionistas emplean su fuerza en 2022, adiós presidente Obrador.
En Perú, el ex presidente Ollanta Humala y su pareja Nadine Heredia fueron a la cárcel al igual que Alberto Fujimori “por penosos casos corrupción”.
¿Y si en México hiciéramos lo mismo con los comodinos constructores de partidos?
Parodiando a la 4T diríamos: “¡Chatarreros, unidos, jamás serán vencidos!”
O lo que es lo mismo: “Se compran-colchones-tambores-diputados-partidos, o algo de fierro viejo que vendan…”