Más de 40 millones de italianos regresaron al confinamiento por COVID-19. Nueve regiones y la provincia de Trento cerraron las escuelas y comercios no esenciales. Luego de la saturación de hospitales.
Al respecto, los comerciantes italianos se dijeron consternados por el regreso al confinamiento por COVID-19. Luego de meses en que han buscado la recuperación económica.
“Me siento muy triste. No me lo esperaba. Pasar de zona amarilla a zona roja es algo inesperado para nosotros”, confesó Ana Cedeño, propietaria del café-bar “Cinque”.
“La esperanza es que en estas dos semanas las cosas cambien. Hemos perdido mucho dinero porque nuestros clientes habituales no vienen. Por el momento, tenemos servicio solo para llevar, veremos qué pasa”, reconoció la trabajadora del café-bar ubicado en el barrio romano Trastevere.
Un año después del primer confinamiento por COVID-19, las calles de Roma están vacías de nuevo. El silencio es dueño de la ciudad y solo algunas tiendas tienen autorización para abrir. Los comercios autorizados son: Supermercados, lavanderías, farmacias, librerías y quioscos. Por otro lado, las escuelas estarán cerradas al menos dos semanas más, y su situación estará bajo constante evaluación por parte de las autoridades sanitarias.
Las autoridades italianas calculan que al menos 6,9 millones de estudiantes volverán a estudiar en línea. Además, según con datos del portal Tuttoscuola (todo escuela, en español) 8 de cada 10 alumnos del país europeo seguirán sus estudios a distancia. Y esta cifra podría aumentar, si los contagios siguen en aumento. Hasta ahora, hay 250 personas contagiadas por cada 100 mil habitantes. Según información oficial.