Por Alejandro Durán
La industria exportadora logró sortear con éxito los embates de la crisis económica provocada por la emergencia sanitaria por el COVID-19. Además, sobrevivió a la estrategia implementada por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador. Pues durante el 2020 no solo conservó empleos y número de negocios, sino logró crecer.
De esta manera, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), al cierre del año pasado se contabilizaron tres millones 028 mil 831 trabajadores de la industria de exportación. Lo que representó un incremento de 0.3 por ciento a tasa anual. Equivalente a un aumento de 10 mil 103 empleados respecto a lo reportado al final de 2019.
En esa misma tónica, el número de negocios adscritos a programas de importación y exportación ante la Secretaría de Economía (SE), aumentaron en 90 unidades. Pasaron de seis mil 339 a seis mil 429 durante el año pasado.
Lo anterior se presentó en el marco de una caída de 8.2 por ciento de la economía mexicana, el peor descalabro en 88 años.
Industria Manufacturera
Cabe destacar que la industria exportadora (empresas adscritas al Programa de la Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicios de Exportación), resintió el impacto económico. Durante mayo y junio de 2020 sensiblemente los efectos del confinamiento por la crisis sanitaria. Pues reportó recortes a tasa anual de 5.7 y 5.5 por ciento, respectivamente.
Las remuneraciones medias reales pagadas al personal contratado directamente por los establecimientos exportadores se incrementaron 1.8 por ciento en diciembre de 2020. Con relación a las de noviembre pasado, según datos desestacionalizados. De manera desagregada, en las unidades económicas manufactureras fueron mayores en 2.2 por ciento. En contraste, en las no manufactureras disminuyeron ‑1.0 por ciento en el lapso de un mes.