Por: Alejandro Durán
Derivado de los embates de la crisis sanitaria y las políticas públicas de la presente administración federal, la actividad industrial transita por la peor situación de la que se tenga registro, pues durante julio de este año reportó una caída a tasa anual de 11.3 por ciento, con lo que en los primeros siete meses de este 2020 acumuló una contracción de 13.7 por ciento respecto al mismo periodo de 2019, lo que representó el peor balance para un periodo similar desde que se reporta el indicador (enero de 1994).
De tal manera, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el sector fabril ya sumó 17 meses de caídas a tasa anual, ya que en febrero de 2019 fue la última vez -cuando avanzó 0.05 por ciento-, en que reportó números positivos en esta materia.
Por medio de un reporte, el INEGI explicó que la baja de 11.3 por ciento fue resultado de la caída que mostraron los cuatro principales componentes del indicador: La minería disminuyó 3.1 por ciento, en tanto las industrias manufactureras se contrajeron nueve por ciento, en tanto la construcción 23.5 y el rubro conformado por la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y gas por ductos al consumidor final se contrajeron 8.9 por ciento a tasa anual.
En su comparación mensual, resultó que la actividad industrial reportó una recuperación de 6.9 por ciento de junio a julio de este año, en donde las Industrias manufactureras se incrementaron 11 por ciento, la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y de gas por ductos al consumidor final 5.5, la construcción 0.9 y la minería 0.8 por ciento durante julio pasado frente al mes anterior, con base a datos ajustados por estacionalidad.
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