Noemí Juárez, doctora que laboraba en el Hospital General del Estado de Querétaro, aseguró que dicho nosocomio se encuentra rebasado en su capacidad para atender a pacientes con COVID-19.
A fin de denunciar estos hechos, ella decidió renunciar a su puesto que ocupaba en urgencias desde el 2015 ante el acoso del que fue víctima.
«Renuncié hace 15 días porque sí de verdad ya está rebasado y si te quejas o manifiestas este tipo de situación pues te acosan, sufres acoso laboral».
Ante esta situación, la doctora consideró apremiante que el gobierno federal intervenga y ayude al estado, pues la saturación de camas inició desde hace un mes. Sin embargo dijo que quienes han denunciado esta situación en repetidas ocasiones han sido víctimas de acoso laboral por parte de las autoridades.
A principios de agosto, el titular de la Vocería Organizacional del Estado de Querétaro, Rafael López González, advirtió que el incremento de casos en nuestro estado podía alcanzar el 100 por ciento al terminar el mes, esto debido a la cantidad de nuevos casos positivos que se reportaron en las primeras dos semanas.
En este sentido, el vocero hizo un llamado a reforzar las medidas de seguridad y prevención, esto con el objetivo de mantener disponibles los espacios para atender los casos más graves de esta enfermedad.
Tal vez te pueda interesar: Querétaro disponible para vacuna contra COVID-19